top of page

Nuestra luz interior

Nuestra luz interior se origina en nuestro corazón como un estado natural de inocencia y conciencia pura. Sin embargo, este brillo puede verse atenuado por hábitos y relaciones tóxicas, reduciéndola a una chispa que nunca se desvanece.



La esencia del alma anhela una cosa: reconocer su reflejo en otra alma y experimentar el amor incondicional una vez más, reavivar la chispa para transformarse en un resplandor ilimitado.


La calidez radiante emitida por esta luz ilimitada impregna cada faceta de nuestra existencia, iluminando incluso las sombras de nuestras vidas. Sirve como un faro guía que nos guía a través de los intrincados pasajes de la vida y refuerza nuestra interconexión con todas las seres vivientes. Al permitir que brille esta luminosidad, encarnamos la esperanza y el amor, inspirando a otros a despertar su brillo interior.


Así como el sol sale fielmente cada día, nosotros poseemos la capacidad innata de trascender obstáculos e irradiar fuerza inquebrantable. Alimentar nuestra luz interior y abrazar nuestro yo auténtico constituye un profundo viaje de autoexploración y metamorfosis. Esforcémonos todos por encender la llama dentro de nosotros, permitiéndole irradiar hacia afuera y envolver nuestro mundo en el esplendor de nuestra luminosidad compartida.



Hay dolores que se llevan en el corazón y no hay manera de sacarlos fácilmente, aprende a dejar ir el pasado o terminarás ahogando tu futuro... y también entiende que la falta de perdón solo duele a quien no puede. perdonar.


Las relaciones son kármicas y nos enseñan lo que necesitamos sanar para poder

evolucionar. El amor no es una relación. Y construir relaciones basadas en expectativas y decepciones nos aleja del propósito último del amor, que es sanar la herida de la separación. La restauración del movimiento original de la vida.


Y paradójicamente cuando piensas que tu corazón está completamente roto, que ni siquiera tú recuerdas cómo reconstruirlo, ahí en medio de ese dolor, soledad y sufrimiento descubres tu verdadero corazón. Y descubres que hay más amor del que jamás podrías imaginar.


El corazón verdadero, el divino, el inquebrantable.

SÍ, es posible renacer. No pierdas la fe. Porque en lo que te pasó y en la forma en que sobreviviste está el patrón de tu alma, su fuerza. Una fuerza inquebrantable que os lleva a la unidad infinita con vuestro Creador.


Al sentir y escuchar los latidos de nuestro corazón, nos sintonizamos con la parte de nosotros que está vinculado a lo infinito y eterno. Nuestro corazón es un portal que se conecta con la Fuente, con el Amor. ~Gurú Ratana



Meditación:


Tómate un tiempo durante el día para sentir los latidos o el pulso de su corazón con la mano derecha. Cierra los ojos y escucha los latidos del corazón.

Puedes hacerlo en el trabajo, mientras viajas en el metro, etc...

En lugar de conectarte a tu teléfono móvil, cierra los ojos y sienta tu propio pulso/latidos.

Respira profunda y lentamente.

Reconectate con tu divinidad.

Experimenta tu esencia divina.


Del vacío a la unidad.

A la plenitud, al verdadero amor infinito.

A la verdadera liberación

aquí y ahora y por siempre.

Fuerza, es posible.

No te rindas.

Amor y bendiciones!

El amor es mi camino, mi oración, mi verdad.



"Hay mucha sabiduría a nuestro alrededor pero no hay corazón para sentirla, no hay cerebro para computarizarlo y no hay compasión para entenderlo.

Medita y tómate un tiempo en tu día para conectarte y alimentar ese espacio sagrado en ti que te permite fusionarte con el infinito."


Con gratitud

Gabriela Ana

Coach de Salud Holística






P6129031.jpg
logo_01_blanco.png

GABRIELA ANA

Health Coach

bottom of page